Cómo usar la grúa para enfermos: una guía fácil
Las grúas de traslado son auxilios que permiten facilitar los traslados de personas enfermas o que padecen una discapacidad y no pueden moverse en autonomía. Siendo dispositivos pensados para mejorar el día a día de los usuarios y de sus cuidadores, es importante que se seleccione el modelo que cumpla las funciones básicas y que disponga del arnés apto para cada uso.
Antes de explicar el funcionamiento de la grúa, es importante saber que la mayoría de ellas funcionan de manera muy parecida. La diferencia que más destaca es si se trata de modelos manuales o con elevación mediante sistema eléctrico.
Procedemos ahora a explicar cómo colocar el arnés, donde y como posicionar la grúa y como proceder con la elevación y el traslado del paciente.
En primer lugar, habrá que colocar el arnés al paciente. Según la tipología de arnés (estándar, de baño, con soporte de cabeza, etc.) hay diferentes maneras de colocarlo, sin embargo, es recomendable que la persona esté tumbada de lado en la cama. Sucesivamente se recuesta la persona hacia el lado opuesto y se tira del arnés de manera que se coloque debajo de la espalda y con las bandas preparadas para engancharlas a la grúa.
Antes de proceder con la elevación, se recomienda revisar que no se produzcan arrugas que pueden incomodar al paciente.
¿Cómo usar la grúa para enfermos? La elevación
Una vez que el arnés ha sido colocado de forma correcta y segura, podemos proceder con las operaciones de elevación.
Primeramente, hay que acercar la grúa a la cama y posicionarla de tal forma que las patas estén debajo del somier. Una vez allí, se abren mediante una palanca.
En segundo lugar, hay que accionar los frenos de las ruedas para evitar que la grúa se mueva durante las operaciones de traslado.
Sucesivamente, cuando el brazo de la grúa esté encima de la persona encamada, se procede a fijar las bandas en los cuatro ganchos.
Las primeras que se van a colocar son las de las piernas, las cuales se colocan en los ganchos interiores de manera cruzada. De forma contraria, en los ganchos exteriores se colocan las bandas de la cadera y de los hombros, las cuales no es necesario que estén cruzadas.
Una vez que se haya llegado a este punto del proceso, habrá que accionar la grúa y proceder con la elevación. Como se mencionó anteriormente, el sistema de elevación puede ser mediante manivela manual o a través del mando si se trata de una grúa eléctrica.
Finalmente, se puede proceder con el desplazamiento del paciente hacia otra habitación o para colocarlo en una silla de ruedas o en un sillón. Todos los movimientos deben de realizarse de forma lenta y siempre con la presencia de un cuidador o de un familiar.